Atenas, capital de Grecia y fuente de origen de las ciudades europeas posteriores. Cuna y estandarte del arte, la ciencia, la filosofía y los inicios de la democracia en Europa. Su religión politeista, su cultura avanzada, su mitología y sus espectáculos la hicieron grande y única hace ya más de 3000 años. Hoy en día, sus históricos monumentos son el reflejo de que la capital de Grecia fue y es todavía una de las ciudades más importantes del mundo. Entre los monumentos y vestigios de esta época clásica, el balón juega un papel que va más allá del espectáculo. Los numerosos clubes que conviven bajo el yugo de los tres “grandes” (Olympiacos, Panathinaikos y AEK) hacen de Atenas, también, una de las grandes capitales de fútbol a orillas del Mediterráneo.
Mención especial merece la selección griega campeona de Europa en el año 2004, ganándole la final a la anfitriona y favorita de la cita, aquella Portugal de un joven Cristiano Ronaldo llamando a las puertas de los grandes nombres de la historia del fútbol. Acompañando a los Rui Costa y Figo en una de sus últimas grandes citas, del cancerbero y héroe de semis Ricardo, además de los Postiga, Carvalho, Maniche, Costinha y compañía. Para hacer un símil con la historia y cultura de la Grecia clásica, la victoria del conjunto de Otto Rehhagel fue como la mítica batalla de los hombres de Leónidas en las Termópilas contra el ejército de Jerjes en el 480 a. C.
Pero si hablamos del fútbol griego y de su competición liguera, se puede afirmar que el fútbol heleno es famoso por la pasión con la que viven sus seguidores los partidos de sus respectivos equipos. Ganar fuera de casa es todo un reto en el país del arte clásico, más aún cuando se trata de visitar el feudo de alguno de los conjuntos que residen en Atenas. La capital de Grecia es el foco principal del balompié heleno. Lo es por masa social, dado que acoge a los tres clubes con mayor número de seguidores del país. Y lo es también por potencial, ya que esos mismos clubes son los tres más laureados de todo el fútbol griego.
Olympiacos, Panathinaikos y AEK conforman el tridente que domina la liga del país desde su creación. Su hegemonía es tal que hace más de veinte años que no gana la liga un club que no sea de la capital. De todos ellos, el Olympiacos es el más laureado. No es un club genuinamente ateniense, ya que está ubicado en el Pireo, un foco urbano integrado en el área metropolitana de Atenas que cuenta con una estructura municipal propia. Pero la intensa rivalidad que mantiene con el Panathinaikos convierte cada «derbi» en un acontecimiento social dentro de la capital del estado. No siempre fue asi, ya que en sus comienzos esa relación de enemistad la mantenía con el Ethnikos, que era el club de la burguesía y las clases altas, mientras que el Olympiacos pertenecía a las clases trabajadoras. A medida que el Olympiacos fue creciendo en nivel y el Ethnikos bajando de categoría, encontró nuevos rivales dentro de Atenas: el AEK y, sobre todo, el Panathinaikos. Entre los jugadores legendarios del Olympiacos podemos encontrar nombres como los Rivaldo, Darko Kovacevic, Dennis Rommedahl, Predrag Đorđević, Thanassis Bebis, Giovanni, Christian Karembeu, Antonios Nikopolidis, Giorgos Sideris, Savvas Theodoridis, Giorgos Darivas, Nery Castillo, Alexandros Alexandris, etc.
El Panathinaikos es casi 20 años más antiguo que su máximo adversario y, al igual que el Ethnikos, tiene fama de elitista. Presume de ser uno de los clubes deportivos más extensos del mundo con sus numerosas secciones polideportivas. La de fútbol es su abanderada, con 20 ligas, 17 Copas y 4 Supercopas. Su rivalidad con el Olympiacos poseedor de 40 ligas, 25 Copas y 4 Supercopas, va más allá de los terrenos de juego y cada vez que ambos clubes se enfrentan la ciudad parece dividirse en dos bandos. Sus jugadores mas famosos o emblemáticos son algunos como Giorgos Kalafatis, Krzysztof Warzycha, Antonis Antoniadis, Giorgos Karagounis, Mimis Domazos, Gilberto Silva, Djibril Cissé, Velimir Zajec, Aljoša Asanović, Igor Bišćan, Robert Jarni, Goran Vlaović, Angelos Basinas, Emmanuel Olisadebe, Józef Wandzik, Antonios Nikopolidis, René Henriksen, Hélder Postiga, Paulo Sousa, Dimitrios Salpingidis, Luis García, Victor Sánchez, entre muchos otros.
El AEK es el tercero en discordia en cuanto a palmares. Comenzó siendo el equipo de los inmigrantes turcos en los años veinte y hoy en día cuenta con un amplio respaldo en otros sectores y una masa social dentro de la ciudad tan amplia como la de sus dos grandes vecinos. Vivió su edad dorada a comienzos de los años 90, cuando ganó tres títulos consecutivos (92,93 y 94), desafiando la alternancia de Olympiacos y Panathinaikos. Hoy día es una alternativa real al poder de los dos gigantes en el fútbol heleno, ya que es el único equipo de Grecia que ha conquistado todas las competiciones locales del país. Esto es debido a que ni Panathinaikos ni Olympiacos guardan en sus vitrinas la Copa de la Liga. Por desgracia esta temporada, por primera vez en 89 años, el AEK jugará en la segunda división helena, tras el descenso después de una nefasta campaña y seguramente uno de los peores años en la historia del equipo heleno. Por las filas de este emblemático club han pasado varios de los mejores jugadores del fútbol griego como Nikolaidis que llegó a ser presidente del club, Katsouranis, Liberopoulos,Kostenoglou, el gran Vassilis Tsartas y Traianos Dellas, actual entrenador del equipo que cogió las riendas del banquillo aurinegro hace menos de 20 días con la salvación casi imposible. También han vestido la camiseta del AEK de Atenas jugadores de nivel internacional como Rivaldo, los argentinos Rodolfo Arruabarrena y Nacho Sccoco. En el banquillo han dirigido técnicos ilustres, Ferenc Puskas entrenó una temporada a finales de los años 70 y más recientemente, el portugués Fernando Santos en dos etapas, y los españoles Lorenzo Serra Ferrer y Manolo Jiménez, el actual entrenador del Real Zaragoza, ganó una Copa de Grecia.
Existen otros dos clubes que gozan de cierta relevancia en la ciudad, aunque su nivel deportivo está muy lejos del de sus vecinos: Panionios y Atromitos. El primero de ellos, Panionios, es el decano del fútbol ateniense, cuenta con 123 años de existencia y es uno de los clubes mas históricos de la Superliga, la máxima categoría del fútbol griego. Puede presumir de haber disputado todas las temporadas en la élite salvo dos. Sus derbis con el Kalithea, un modestísimo club de la capital, despiertan una gran rivalidad, aunque no están a la altura, claro está, de Olympiacos y Panathinaikos.
En cuanto al Atromitos, es un modesto club pero con más de 90 años de historia. Después de una vida de muchos altibajos deportivos e institucionales (incluida la fusión con Chalkidona FC en 2005 para mantener la categoría), ahora lucha por abandonar su rol de equipo “ascensor” e instalarse definitivamente en la Superliga de Grecia. No obstante, hay que señalar que esta humilde escuadra ya disputó la Copa de la UEFA en 2006, cayendo en primera ronda ante aquel todopoderoso Sevilla FC que se proclamaría campeón al final de la misma. Y que las últimas temporadas ha conseguido finalizar sus campañas como 3er y 4rto clasificado de la competición helena. Lo que le ha dado la oportunidad de volver a disputar competición europea (UEFA Europe League) de nuevo.
Aunque Atenas, y el país griego en general, estén pasando por una de las mayores crisis económicas jamás vista y su fútbol tampoco pase por su mejor momento. Siempre alabaremos su pasión y simpatizaremos con ellos, como esencia del fútbol en el viejo continente y como cuna de cultura y sabiduría, el legado de la cual sigue alimentándonos hoy en día a todos y a todas. Parafraseando al gran filósofo Platón: «Lo que se mueve por sí mismo es inmortal.» Y sin duda Grecia y su capital Atenas, lo han sido, lo son y lo serán por siempre.
Alberto Riquelme Pérez (@albertoriquelme)
Luis Sánchez López (@luchosalo21)
Manel Torrejón Perea (@manelcandeu)