El Institut National du Football (INF) fue creado en 1972 en las cercanías de la localidad de Vichy. Era un centro de formación para jugadores de 17 a 19 años del que salieron jugadores como el gran Jean Pierre Papin. Años más tarde en 1988 el centro fue trasladado a Clairefontaine y en 1990 cambió los estatutos para convertirse en un centro de formación, una academia del futbol para jóvenes de a partir de los 13 años.
Esta institución se ha convertido en un vivero de jugadores para la selección nacional francesa, Nicolas Anelka, Phillipe Christanval, William Gallas, Jerome Rothen o Louis Saha han alcanzado la internacionalidad tras pasar por este centro, y más recientemente tenemos los casos de Obertan, Diaby y Ben Arfa. De todos los jugadores salidos de este gran centro de formación destaca uno por encima de todos, Thierry Henry.
El Centro técnico nacional Fernand Sartre, se encuentra en el pequeño pueblo de Clairefontaine-en-Yvelines, a 50 kilómetros de Paris. Es el centro nacional de la asociación de fútbol y uno de los más importantes centros de formación del país ya que acoge a todas las jóvenes promesas que destacan en la Ile de France, es decir, en la capital y sus alrededores. El centro esta rodeado de bosques y es un inmenso terreno repleto de campos de futbol cubiertos y descubiertos, gimnasios, saunas, residencias con dormitorios y pistas de tenis.
Las promesas se entrenan durante horas y deben compaginar la actividad física con los estudios, faceta en la que Henry nunca destacó y que precisamente fue lo que complicó su ingreso en el INF. “ En la escuela era un bandido , no escuchaba ni me planteaba si teníamos deberes . En Clairefontaine tuve que cambiar”. Explicaba el máximo goleadora de la historia de la selección francesa.
Desde su apertura en 1988 se ha convertido en un punto de referencia del fútbol de cantera en el mundo. Como comentó una vez el ex seleccionador sueco de la selección inglesa Sven Goran Eriksson: “Si Inglaterra hubiera contado en las últimas décadas con un espacio equivalente para las nuevas joyas de las Islas, probablemente los británicos hubieran logrado algún gran título”.
También es el enclave habitual de concentración del equipo nacional francés y al 3que Michel Platini bautizó como “la casa del futbol francés”.
En Clairefontaine no solo es imprescindible tener aptitudes físicas o futbolísticas, y tal como se ha explicado anteriormente se necesita compaginar con los estudios. Como en este centro no hay distinciones sociales, ni raciales ni culturales entre los estudiantes, también enseñan una disciplina de compañerismo, buen comportamiento, ir bien uniformados y cuidar todo lo que el centro proporciona para poder desarrollar la actividad diaria. Una anécdota curiosa de Thierry Henry es que su primer par de botas que le dieron allí:
“ Fueron las Adidas Copa Mundial, el modelo más conocido de Adidas. Las tuve con apenas 13 años. Tenían una bella lengüeta blanca y siempre le daba al balón con el interior del pie para no ensuciarlas. Es por esa razón que todavía hoy me gusta pegarle con el interior del pie. No saben la felicidad que me produjo tener esas botas. Ya por aquel entonces costaban 800 francos (120 euros). Eran lo máximo.”
La maquinaria del centro no descansa, para ello esperan hacer uso de cada charla, de cada experiencia y de cada segundo vivido en un paraíso futbolístico de 56 hectáreas en el corazón del bosque Rambouillet.
Llegar a Clairefontaine no es sinónimo de tener las puertas abiertas a la gloria. Muchos de los residentes del centro no logran alcanzar ni la primera división francesa, siguen su carrera de futbolísticas pero a un nivel más amateur. El caso de Henry es diferente, el director de la escuela Claude Dusseau, destaca la capacidad mostrada por “Titi” nada mas entrar a la academia: “Todos le prometíamos un futuro esplendoroso”. Tal fue así que durante su estancia en la academia, el AS Mónaco se aseguró los derechos del gran delantero galo para que forme parte del club del principado una vez acabara su etapa de formación en Clairefontaine.
Alberto Riquelme Pérez (@AlbertoRiquelme)
Posted by Fernando on 15 septiembre, 2011 at 13:27
Todos los países deberían apostar por una escuela de fútbol como esta para trabajar y enseñar a sus jugadores los valores deportivos y sobretodo personales de la vida.
Posted by Miguel on 13 diciembre, 2011 at 1:55
Estoy de acuerdo contigo, asi habria mas competitividad en el futbol